Andamios o trabajos verticales.

A colación con la entrada anterior, obras en fachada de un edificio, se plantea como ejecutar las obras.

Tenemos por un lado los sistemas tradicionales de andamios, ya sean verticales o colgantes, y las plataformas elevadoras.

Debemos considerar también que ultimamente han aparecido en el sector de trabajos en fachada los denominados trabajos verticales.

Por trabajo vertical se entiende básicamente, el trabajo con dispositivos por medio de los cuales una persona puede estar suspendida en el aire para realizar ciertas tareas.

Los trabajos verticales son técnicas para trabajar en altura que se basan en la utilización de cuerdas, anclajes y utensilios de progresión para acceder a objetos, por ejemplo la fachada de un edificio.

Es aconsejable la técnica de trabajos verticales en aquellas situaciones donde el montaje de andamios resulte dificultoso técnicamente o presente un riesgo mayor que realizarlo mediante verticales y quizás también en trabajos de poca envergadura.

En la mayoría de los casos suele ser factible la instalación de andamios verticales o el uso de plataformas elevadoras, este último sistema con un precio bastante más alto.

Tenemos que tener en cuenta que un trabajo en vertical de reparación en una fachada con una maquinaria algo pesada, como podría ser un martillo eléctrico, complica la operatividad del operario pues al aplicar la fuerza de su cuerpo contra la pared se produce el efecto contrario rebote, es decir la resistencia de dicho elemento por lo que la operación es poco efectiva.

Evidentemente nunca podrá compararse con la msima actuación que tendría el mismo trabajo realizado desde un andamio.

Que duda cabe si además hay que emplear morteros especiales de rápido fraguado en los que el tiempo es vital. Hay que considerar los tiempos de desplazamiento entre el punto donde se realiza la reparación y el de preparación del mortero.

Sin embargo esta operación de preparación, puede ser facilmente realizada en el propio andamio, es decir el operario puede tener los materiales acopiados, las herramientas de preparación y trabajar de una manera ordenada sin necesidad de dejar a criterio del operario, el tener que volver a escalar la fachada para prepararlo o avisar al compañero que evidentemente debe estar alerta para que se lo proporcione.

Por otra parte y creo que es fundamental, el técnico que dirige y controla una obra debe poder acceder directamente a ella de una forma manera directa, como podría ser el subir a un andamio sin más preámbulos.

Sería la primera vez en mi carrera profesional que debo utilizar un arnés para acceder a una dirección de obra.

Fachada Asilo de Ancianos Hermanitas del Santísimo Cristo de La Laguna.

Inicio de la reparación. Andamiada instalada con malla protectora de la vía pública.

Operario realizando una operación de picado. Veáse posición de esfuerzo, pierna adelantada.

Aplicación de mortero de alta resistencia en zona de reparación.